El olor del sueño

Nuestro protagonista es asistente social. Trabaja con los vecinos de barrios o zonas marginales, como gitanos, rumanos u otros.
Cuando comienza la historia, el hombre sueña que ataca a personas por la calle. Mientras tiene estas pesadillas, su esposa o sus hijos -con quienes duerme la siesta- reciben los golpes destinados a los protagonistas de sus sueños.

Harto ya de esta molesta situación acude a un psiquiatra al que conoció en una discoteca, durante una actuación de éste, en la que hipnotizaba al público. El doctor en cuestión, tras despertar de la hipnosis a nuestro personaje, le advirtió de sus sueños, de su sucio inconsciente.
Comienzan las sesiones y las pesadillas van desapareciendo. Sin embargo, aparecen otros mucho peores. Ahora, en sus sueños, secuestra niños de entre ocho y 12 años, obligado por una red de pederastas y secuestradores.

Esto no tendría mayor importancia, si no fuera porque, una vez despierto y no mucho después de soñar, se entera de la autenticidad de los secuestros por las noticias. Preocupado, visita a las familias de los niños desaparecidos y comienza a investigar por su cuenta; paralelamente a la policía. No encuentra nada.

Sueña y visita al psiquiatra sin cesar. Lo peor de todo, es el olor que percibe en sus sueños y cómo lo recuerda ya despierto. Es el olor de los niños; de su miedo, de sus lágrimas, de su ropa... ¿Es el olor del sueño?
La acción transcurre en el mes de agosto; un verano de los más calurosos de la historia. El protagonista se seca continuamente el sudor de frente y cara con un pañuelo de tela, dando una extraña sensación de pegajosa suciedad y creando un ambiente agobiante. Está de vacaciones, por lo que dispone del tiempo suficiente para buscar solución al asunto.

Este personaje emplea sus noches en dirigir una banda de música, con niños y adultos. Y el hijo de uno de éstos, que resulta ser su mejor amigo, también desaparece. Ya no son únicamente niños pobres. Están demasiado vigilados.
Y él continúa soñando que es el secuestrador. Ya no sabe si son sueños, premoniciones o actos que comete sonámbulo. Se está volviendo loco.

En uno de sus sueños, se lleva a un niño pequeñito, hijo de una prostituta, al que encuentra solo en la Casa de Campo. Pero es menor de ocho años y los miembros de la red lo rechazan. Lo devuelve a su madre, que jura vengarse.
En otra de sus pesadillas, secuestra a sus dos hijos. Y resulta ser tan cierto como en las anteriores. Ahora está mucho más implicado. Su esposa está a punto de enloquecer. Jura vengarse.

Las cosas están mal para el pobre hombre que sueña estas barbaridades. Sigue con sus sesiones, pero no logra atajar el problema. Ocurre todo lo que sueña; tal y como sale de su cabeza.
Un buen día, tras moverse e investigar incansable, encuentra la clave. Cree saber cómo encontrar a quienes recogen a los niños robados. Pero necesita secuestrar a un último niño; lo que no consigue fácilmente. Finalmente, logra llevarse a un niño rumano y descubre algo aterrador. Ha encontrado a los niños; pero lo que ve y lo que le esta a punto de suceder... es algo que le llegará a costar la vida y la de su familia...